El sol sale en el horizonte y el espectáculo queda al descubierto: las ondulaciones marcan el mar y la emoción de los surfistas, siempre madrugadores, queda a flor de piel. Se viene el Quiksilver & Roxy Young Guns, torneo de jóvenes, y el escenario no puede ser mejor en el balneario Honu Beach. Agua con tonalidades verdes y olas con un tamaño (al menos dos metros) y un poder que podrían asustar a cualquier mortal. Salvo a ellos, claro.
Pueden ser chicos -desde 9 a 18 años- pero tienen ese espíritu aventurero que, lejos de achicarlos, los motiva. Sus ojos brillan cuando miran fijamente el océano y se dan cuenta que “está épico”, que por delante tendrán un hermoso desafío. Para eso se dedican a esto y se meten cada día en el mar. Para medirse en esta condición. Así arrancó esta nueva edición de la competencia junior por excelencia que tiene el semillero del surf nacional y que significó la segunda fecha del circuito que fiscaliza la Asociación de Surf Argentina (ASA). Dos intensos y largos días a puro surfing, con un récord de 130 inscriptos y cinco categorías en ambas ramas (masculina y femenina, ver resultados) que ratificaron que, por la cantidad y calidad, el futuro de este deporte está en muy buenas manos.
“Esta nueva generación tiene más claro lo que quiere y quien los puede acompañar en su desarrollo. Hay entrenadores, eventos, escuelas y, sobre todo, ejemplos al alcance para crear y proyectar una carrera deportiva”, explicó Martín Passeri, el máximo campeón del torneo nacional –seis veces- quien ha sido un pionero en el profesionalismo de este deporte enel país en los 90 y sigue vigente a los 46 años, como surfista pero también, desde hace años, como coach (del Team Quiksilver-Roxy) y director del Centro de Alto Rendimiento (CEEIS) en Honu.
El Guerrero también reflexionó sobre las condiciones especiales que tuvo el mar, en especial el primer día, y cómo se desenvolvieron los jóvenes que él conoce tan bien. “El hecho de haber tenido varios eventos en el año, con muchos juniors compitiendo en Open y en cualquier condición, entrenando con la Selección, metiéndose en spots muy difíciles como La Paloma pensando en correr el torneo de Quik, que es el más duro, creo que los ayudó a correr el umbral de exigencia. En el evento se los vio sólidos a todos: los M18 la rompieron y el resto se mostró muy bien, encarando largas remadas contra la corriente y olas de dos metros rompiendo con mucha fuerza. No sólo soportaron el desafío de un mar así sino que además mostraron un surf progresivo con maniobras contundentes”, analizó.
Festeja Thiago Passeri, el hijo y pupilo del mítico Martín. Volvió a ganar dos categorías (Diego Diyorio)
“Fue un día increíble, de olas épicas para lo que es Mardel, con condiciones de viento excelentes. Yo tengo experiencia y me metí al mar para testearlo, porque tenía mis dudas si algunos chicos y chicas podrían entrar, pero no sólo lo hicieron sino que agarraron olas y completaron maniobras muy interesantes. En una situación tan exigente se necesita mucho estado físico y técnica. Y demostraron que lo tienen, que están en un gran camino, que el circuito junior es muy competitivo y que el futuro del surf argentino es promisorio”, fue la opinión de Walter Villalba, ex competidor -16 años en el circuito nacional, representante argentino en los Panamericanos- y actual juez de la ASA que estuvo en el torneo.
“Puntuamos la agresividad, combinada con la fluidez y el control, y nos llevamos lindas sorpresas. Todos los jueces estábamos expectantes a ver qué podían hacer los chicos, sobre todo algunos chiquitos, muy livianos, y nos fuimos muy felices. Porque, además, no es que lo hicieron en una sesión de free-surf con amigos sino en un torneo puntuable, con tiempo en cada heat”, cerró. Maxi Siri, cinco veces campeón nacional, fue más allá. “Fue uno de los mejores torneos juniors que recuerde, con gran calidad de olas y sobre todo de surfistas. Hoy me animo a decir que se viene la ‘tormenta argentina’”, dijo en clara referencia a la famosa Tormenta Brasileña que actualmente copa el tour de elite de la WSL.
El torneo tuvo como ganadores, en M18, a Ignacio Ruggiero (hombres) y Cocó Cianciarulo (mujeres). Ella, con el acompañamiento habitual de su padre, Señor Flavio, el famoso músico que fuera bajista de los Cadillacs, volvió a dominar con su surf de poder, como viene haciendo desde hace cuatro años. Hasta 2020 fue campeona tanto de M18 y M16, mientras que el año pasado repitió en M18 –ya no pudo correr en M16-. Ahora la surfista estrella de Roxy Argentina es líder tras dos fechas. El máximo ganador de la fecha, igual, fue Thiago Passeri, el hijo de Martín, quien con 13 años sigue dominando en dos categorías: M14 y M16.
Cocó Cianciarulo volvió a imponerse en M16 y M18, como desde hace cuatro años. Siempre acompañada por Sr Flavio, su padre. (Diego Diyorio)
“La fecha la arranqué como un torneo más y terminó siendo mi mejor competencia. Fue alucinante. Por los resultados, claro, porque ganar dos categorías se siente increíble, pero también por las buenísimas condiciones de olas, por mi surf, además de la buena onda y apoyo de mis amigos y familia desde la playa. Estar en casa, en Honu, también lo hizo especial, lo mismo que haber podido disfrutar de una nueva gran edición del torneo. Es mi quinto y sin dudas que terminó siendo el más especial de todos”, admitió el purrete que se destaca por su energía y competitividad. “Sí, me encanta desgastarme, cansarme, correr muchos heats y competir todo el tiempo”, explica quien en eso se parece mucho a su padre.
“El punto de Thiago es que le gusta surfear, se mete mucho al agua, miramos sus imágenes y es autocrítico y lo motivan los desafíos”, explicó Martín. “Es verdad, me encanta meterme. Lo hago todos los días, desde dos hasta cuatro veces, si está muy lindo. También es cierto que vemos videos, me corrige y estamos hablando todo el tiempo de surf, compartimos todo… Si me preguntás qué me hace especial es tenerlo a él. No todos tienen ese privilegio que yo aprovecho… Y, como dije, también el ser tan apasionado de este deporte, tener esa constancia de meterme al mar y el poder disfrutar de ser muy competitivo”, analizó.
Ya no hay dudas de por qué todo el surf argentino terminó ilusionado luego de presenciar esta nueva fecha del circuito junior.