Con el correr del tiempo, Rodrigo De Paul se transformó en un líder de la Selección Argentina. Su enorme compromiso para con la camiseta nacional, romperse el alma dentro de la cancha sacrificándose individual y colectivamente, y siempre tirando hacia adelante, hicieron que sus propios compañeros le otorgaran el rol que posee en la actualidad.
Muy cercano a Lionel Messi, como así también a Nicolás Otamendi y Alejandro Gómez. Al oriundo de la ciudad de Sarandíse lo ve muy cómodo dentro del equipo que lidera Lionel Scaloni, con quien fue campeón de América en tierras brasileñas, y es una de las voces autorizadas para ponerle paños fríos a la gran ilusión y ansiedad que hay entre los fanáticos albicelestes.
De Paul, como todos sus compañeros, no ven la hora de reunirse en Estados Unidos para preparar los dos encuentros amistosos de la fecha FIFA que se llevará a cabo entre el 23 y 27 de septiembre próximo. Allí, la Selección Argentina se medirá ante Honduras y Jamaica, respectivamente, y serán los últimos dos compromisos antes de viajar hacia Qatar.
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A pesar de que el ex mediocampista de Racing, Valencia CF y Udinese está muy ilusionado con lo que puede ser la actuación de la Scaloneta en la cita mundialista, trató de poner un paño frío en la previa:“Es importante generar ilusión, perohay que transmitir un poco de calmaporque la final de la Copa del Mundo la gana uno solo”, aseveró en diálogo con DirecTV Sports. Y para argumentar, agregó:“Es un torneo muy difícil que nació en 1930 ynosotros solo ganamos dos, incluso con los mejores jugadores de la historia”. Humildad y serenidad para que los hinchas vuelvan a las bases.
