Por los cuartos de final de la Copa América, Argentina y Ecuador jugaban por la última plaza de las semifinales del torneo. El viernes, Perú y Brasil habían ganado sus respectivos partidos y, en esta jornada, Colombia había eliminado a Uruguay en la tanda de penales. Esta noche, el conjunto albiceleste superó su compromiso y se ubicó entre las cuatro mejores selecciones de la competencia.

En el estadio Olímpico Pedro Ludovico, el conjunto dirigido por Lionel Scaloni tenía un duro partido ante el equipo de Gustavo Alfaro. A pesar de que más de un déjà vu se adueñó de nuestra mente ante tantas oportunidades -claras- falladas, Argentina pudó vencer al rival en un partido que solo importaba ganar. Quién pudo cortar con el maleficio de la jornada fue Rodrigo de Paul, autor del primer tanto argentino, clave para la confianza.


Es injusto reducir su primer tiempo al gol convertido. En los primeros 45 minutos, Rodrigo De Paul falló solo 1 pase sobre 20 intentados. Siempre como opción de pase, el futuro jugador de Atlético Madrid es un recurso más que confiable a la hora de distribuir la pelota en la mitad de cancha. Y dejó en claro que también tiene jerarquía a la hora de pisar el área rival.

El abrazo entre el asistidor y el goleador. Foto: Getty

El abrazo entre el asistidor y el goleador. Foto: Getty

En el segundo tiempo repitió la fórmula: un solo pase fallado para culminar su encuentro con un 94% de efectividad en las entregas. Notable. Además fue el jugador que más faltas recibió (3) en el partido, sumándole 6 recuperaciones de pelota a sus registros. Partidazo de Rodrigo.

Rodrigo De Paul vs. Ecuador:

- 90' jugados.
- 94% de precisión en pases.
- 6 recuperaciones de pelota.
- 3 faltas recibidas.
- 1 remate.
- 1 gol.