Luego de años de dominio en el circuito, tanto masculino como femenino, el tenis estadounidense vive una nueva era que ilusiona. Entre los hombres se destacan Taylor Fritz, Ben Shelton, Tommy Paul y Frances Tiafoe, mientras que, en las mujeres, los nombres más fuertes son los de Coco Gauff, Madison Keys, Amanda Anisimova, Emma Navarro y Jessica Pegula. Los tiempos de Sampras, Agassi, Roddick y las hermanas Williams quedaron atrás y esta es la nueva generación que sueña con volver a reinar en el tenis.
Jessica Pegula nació en 1994 en Nueva York y de chica comenzó a jugar al tenis y se destacó. Por cuestiones familiares tuvo ciertas facilidades para desarrollarse y formarse. En el año 2009 se inició como profesional, aunque no fue un comienzo sencillo para ella por diversas lesiones. A sus 24 años fue campeona por primera vez, luego estuvo a punto de abandonar su carrera, pero volvió al circuito más fuerte que nunca y en los últimos dos años conquistó nada más y nada menos que siete títulos en individuales y además jugó su primera final de Grand Slam.
Pegula y un comienzo difícil en el circuito
No fueron fáciles los primeros años de Jessica Pegula como profesional. Se insertó en el circuito de la WTA en el año 2009 y tuvieron que pasar diez años para que logre meterse en el Top 100 y ganar su primer título. En el medio hubo algunas lesiones, pero más allá de eso, su carrera tuvo la particularidad de la resiliencia y el no bajar los brazos. No son muchos los tenistas que, al no encontrar resultados en sus primeros años, deciden retirarse. Pegula insistió y tuvo su premio.
Jessica Pegula en 2019. (Foto: Getty).
Regularidad y primer título
Luego de algunos años alejada de los primeros planos y sin poder ingresar en el Top 100, algo que todos los jugadores necesitan para poder armar su calendario con cierta tranquilidad, sabiendo que ingresan directamente a los cuadros principales de los Grand Slams, por ejemplo. Pegula fue campeona del WTA 250 de Washington en agosto de 2009 y alcanzó el puesto 55 del ranking.
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2022, un año en que casi lo deja todo
Tras coronarse en Washington 2019, Pegula logró lo más difícil: establecerse en el circuito. Ya con un físico que no le trajo problemas, en 2022 ganó su segundo título y alcanzó el que hasta hoy en día es su mejor puesto en el ranking de la WTA: el número 3. Pero en ese 2022 también atravesó un momento difícil ya que estuvo dos semanas en la clínica junto a su madre que estuvo al borde de la muerte producto de un paro cardíaco y eso la llevó a pensar en dejar la actividad profesional para hacerse cargo de cuestiones familiares, pero afortunadamente su madre se recuperó y eso no fue necesario.
Jessica Pegula ganó 9 títulos en individuales y 7 en dobles. (Foto: Getty).
Títulos, final del US Open y el sueño de ganar un Grand Slam
Luego de vivir uno de los momentos más complicados de su vida, Jessica Pegula se enfocó en el tenis y demostró que es capaz de ser una de las mejores tenistas del mundo. La madurez la alcanzó casi a los 30 años y, entre 2023 y lo que va de 2025 ganó siete títulos: 2 WTA 1000, 2 WTA 250 y 5 WTA 500.
Pegula, campeona en el césped de Alemania ante Iga Swiatek en este 2025. (Foto: Getty).
Además, fue finalista del WTA Finals en 2023 y allí perdió ante Iga Swiatek y en 2024 jugó la final del US Open, en la que cayó ante Aryna Sabalenka. En este 2025 llega al cuarto Grand Slam del año como una de las máximas candidatas.
Pegula y Sabalenka en la premiación del US Open 2024. (Foto: Getty).
Jessica Pegula, la heredera de una fortuna multimillonaria
La familia Pegula, con Terry y Kim -padres de Jessica- a la cabeza son una de las familias de Estados Unidos con un mayor patrimonio, el mismo se estima que ronda los 8 mil millones de dólares y entre sus principales actividades, entre ellas una empresa de perforación de gas natural -East Resources- además del equipo de Hockey sobre hielo Buffalo Sabres y uno de los más emblemáticos de fútbol americano como Buffalo Bills.
Terry Pegula, dueño de los Buffalo Bills. (Foto: Getty).
En más de una oportunidad, Jessica Pegula fue consultada por la fortuna familiar y fue tajante: “¿Qué es lo más molesto? Es que la gente piensa que tengo un mayordomo, que me llevan a todos lados con un chofer. Tengo una limusina privada, que vuelo en privado a todas partes. Definitivamente no soy así”. Además, aclaró: “El tenis es mi trabajo y mi carrera. Es lo mío y mis padres no tienen nada que decir sobre lo que debo hacer en la cancha”.
Tras un Wimbledon 2025 decepcionante, Pegula sueña con ganar el US Open este año. (Foto: Getty).
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