Desde que fue nombrada como la sede de la Copa del Mundo, Qatar ha sido un país en el ojo del huracán por su día a día y las exigentes costumbres que tienen a comparación de otras naciones.
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Este era uno de los argumentos principales por los cuales se oponía la realización del torneo en este país, con los turistas obligados a acatar las normas locales y no meterse en problemas.
Existen múltiples restricciones en temas como el alcoholo la homosexualidad, sabiéndose que en Qatar está prohibida y aquellos que protesten este tópico podrían llevarse penas muy graves.
El partido entre Portugal y Uruguay estaba señalado como uno de los más esperados, paralizando a todos los rincones del mundo por la cantidad de estrellas en el campo. Y sí, existió un espontáneo que tocó dos temas sensibles.
En los inicios del segundo tiempo ingresó un fanático a protestar, con una playera que decía “Salven a Ucrania” y por detrás “respeto a las mujeres iraníes”, corriendo con una bandera gay en las manos. La transmisión internacional rápidamente le quitó visilidad, pero sí existieron videos y fotografías que lo lograron retratar.
