Una de las grandes rupturas en el 2020 se dio cuando se separaron Óscar de la Hoya y Saúl Canelo Álvarez, luego de una demanda del mexicano contra Golden Boy Promotion y DAZN. Tras un largo tiempo, el Tapatío rompió el silencio y dijo que el exboxeador no tomaba las decisiones importantes en la empresa y que solo se preocupaba por beber.
En agosto del año pasado, el nacido en Guadalajara daba tremendo golpe en el tablero a estar dispuesto a ir a juicio con DAZN y Golden Boy Promotion. Más ruido hizo cuando su entrenador, Eddy Reynoso, confirmaba que su peleador era agente libre, por lo que podía llevar adelante cualquier tipo de negociación en el futuro.
Sin embargo, desde ese día, Canelo Álvarez no habló de Óscar de la Hoya, pero con Graham Bensinger si lo hizo y lo dejó muy mal parado. “Él (Óscar de la Hoya) no es Golden Boy. Él no hace nada en Golden Boy. Él se está preocupando por tomar y andar en otras cosas”, expresó el Campeón del Mundo, quien comentó que él es una persona leal.
Y agregó: “Las decisiones las toman otras personas. Cuando Richard Schaefer dejó Golden Boy, se llevó a todos los boxeadores a PBC. Y también quería llevarme a mí, pero yo fui el único boxeador que se quedó con Golden Boy porque soy un hombre leal”.
Cabe recordar que la pelea entre el expeleador y Canelo Álvarez comenzó a darse cuando la promotora decidió que deje vacante el Título Mundial FIB Mediano, debido a que tenía que pelea frente a Sergiy Derevyanchenko, retador que no dejaba buenos dividendos a la empresa.