En su regreso a los cuadriláteros tras diez meses de inactividad, Emanuel Navarrete no lució del todo bien exponiendo su título mundial de peso pluma de la OMB ante un muy trabajador Eduardo Baez, quien por momento lo desbordó con gran volumen de golpes para ponerlo en aprietos.
Más lento en su trabajo de piernas que lo que se acostumbra mostrar, también lesionado en su mano izquierda, pareció que El Vaquero estaba transitando el camino de una noche de pesadilla en la Pechanga Arena de San Diego. Sin embargo, lo resolvió todo en el sexto asalto con un nocaut de un solo golpe. Un implacable gancho al hígado que acabó con la resistencia de su compatriota.
Más allá del oxido lógico producto de la inactividad que solo se quita subiendo al ring, a Navarrete le costó mucho dar las 126 libras y ese esfuerzo se notó en la pelea. Por ello lo más probable es que a partir de su próxima presentación se instale ya en el peso súper pluma, donde lo esperan grandes peleas desde lo deportivo, pero también desde lo económico.
Una gran oportunidad para El Vaquero sería poder concretar el duelo mexicano ante Oscar Valdez del que ya se habló en el pasado. El oriundo de Nogales ya no tiene títulos mundiales en su poder, pues perdió el cinturón del CMB siendo ampliamente derrotado por Shakur Stevenson.
Y es precisamente Shakur el otro gran objetivo que tiene Navarrete en las 130 libras, que le ofrece la posibilidad de conquistar dos títulos mundiales. Esta pelea, sin embargo, no parece ser un desafío para tomar en lo inmediato, pues viendo el nivel del estadounidense sería mejor que el Vaquero tenga algunas peleas previas de adaptación a la nueva categoría.