El regreso de Raúl Jiménez a la selección mexicana es un secreto a voces. Luego de volver a jugar en la Premier League con su equipo el Wolverhampton, el delantero de 30 años ya cuenta las horas para volver a jugar con el Tricolor y todo parece que esto sucederá en septiembre en el octagonal de la Concacaf clasificatorio para la Copa del Mundo Catar 2022.
“Ya estoy preparado, es lo que más quiero, tanto tiempo he estado esperando y, si se da, qué biueno”, declaró Raúl Jiménez sabiendo que en septiembre y octubre México tendrá una actidad muy intensa. “Van a ser tres partidos en cada fecha FIFA, pero habrá que entrenar y dar lo mejor, habrá rotaciones porque no creo que en siete día juegues tres partidos, es algo que desgasta mucho, no creo que siempre jueguen o juguemos los mismos, pero hay que ir con toda la voluntad y las ganas”.
En entrevista para Marca Claro, el Lobo de Tepeji, comentó que luego de su más reciente partdo con la selección, el 17 de noviembre de 2020 contra Japón,y cuando la recuperación de la lesión en la cabeza se lo permitió, siguió muy de cerca la actividad del Tricolor de Gerardo Martino. “Estuve siguiendo los partidos, la Nations League, la Copa Oro, los Olímpicos, creo que hay excelentes jugadores con los que se pueden hacer grandes cosas“.
La banda de protección
En su regreso a la Premier League con el Wolverhampton contra el Leicester City, Raúl Jiménez rechazó sentir miedo a la horade competir por el balón por lo alto y dijo que, si de él dependiera no utilizaría la cinta protectora, pero tiene que llevarla mientras esté en los partidos como medida de precaución obligatoria.
“Ese miedo de ir a cabecear eso ya quedó atrás; en los primeros entrenamientos de la pretemporadame enviaban pelotas al aire y yo cabeceba con el lado de la herida, al ver que no me dolió la siguiente fue fácil y a partir de ahí todo normal, como si nada, si yo pudiera jugar sin la banda me la quitaría, pero los médicos no me dejan”, dijo Raúl Jiménez.
Raúl Jiménez en el partido contra Japón de 2020 (Foto: Imago7).
