La Premier League continúa quemando jornadas en medio de la ola de coronavirus que se ha instalado en la primera división inglesa. Los encuentros suspendidos siguen sin fecha mientras los positivos crecen y las preguntas alrededor de un parón hacen cada vez más parte del día a día. Récord de contagios en la última semana.

Thomas Tuchel prendía el ventilador ayer con unas duras declaraciones contra una Premier que de momento no piensa ni por un segundo en interrumpir sus competencias. La mejor liga del mundo hace de momento oídos sordos ante los reclamos de entrenadores y jugadores sobre un contexto que gracias a Ómicron se hace prácticamente inviable en el momento de la temporada más congestionado por la carga de partidos.

Por medio de sus redes sociales y página de web, el ente comunicó los resultados de las pruebas realizadas en la última semana y los resultados son más que devastadores: "La liga puede confirmar hoy que entre el lunes 20 de diciembre y el domingo 26 de diciembre se administraron 15.186 pruebas de Covid-19 a jugadores y personal del club. La liga continúa trabajando con los clubes para mantener a las personas seguras al ayudar a mitigar los riesgos de Covid-19 dentro de sus escuadrones”.

"De estos, hubo 103 nuevos casos positivos. Las medidas de emergencia Covid-19 de la Premier League incluyen protocolos como el uso de cubiertas faciales en el interior, la observación del distanciamiento social, la limitación del tiempo de tratamiento y el aumento de las pruebas”, finalizaban desde la Premier en cuanto al número de casos detectados entre jugadores, entrenadores y staff de los 20 equipos del campeonato.

La tensión crece entre jugadores, clubes y una Premier donde las declaraciones cruzadas se han convertido en pan de cada día. La mejor liga del mundo sigue avanzando en una temporada marcada por la variante Ómicron y una ola de contagios que divide al mundo del fútbol ingles entre parar o no por varias semanas sus competencias.