Bayern Múnich se consagró campeón de la Bundesliga en una definición increíble. Le ganó al Köln por 2-1 como visitante y el empate de Borussia Dortmund ante Mainz 05 le permitió alzarse con el título. No fue una buena temporada de los Bávaros, pero al final, lograron su undécimo título consecutivo de la liga alemana.

El Köln se las hizo ver difícil al Bayern y hasta los desesperanzó en la parte final con el empate al minuto 80. Sin embargo, apareció Jamal Musiala para ser héroe con sus jóvenes 20 años y darle el título. El Dortmund, en tanto, desperdició la chance más certera de terminar con el reinado de los de Múnich. Dependían de ellos mismos y no pudieron ante un Mainz, que llegaba a este partido con cuatro derrotas consecutivas. El empate en 71 puntos entre ambos equipos le dio el título a los de Thomas Tuchel por diferencia de gol.

Los primeros 45 minutos de ambos partidos fueron a pedir de los Bávaros. Resulta increíble cómo el Dortmund se autodestruyó tan rápidamente. Fueron tres golpes fuertes para el equipo de Edin Terzic, mientras que el Bayern hacía lo que le correspondía hacer.

La primer novedad llegó en Colonia cuando a los ocho minutos de juego Kingsley Coman marcó un golazo. Todo empezó de una recuperación de Thomas Müller y terminó con un remate al ángulo del francés para dejar completamente parado a Marvin Schwäbe. El gol le daba el título al equipo de Thomas Tuchel por mejor diferencia de gol ante la igualdad de puntos.

En el Dortmund vs. Mainz había bastante intensidad y hasta nervios del local. Y todo empeoró al cuarto de hora de partido. De un córner, llegó el cabezazo en soledad de Andreas Hanche-Olsen en el primer palo para el primer gol de partido y silenciar el Signal Iduna Park. Mainz daba el golpe.

Más allá del nerviosismo del Dortmund, tres minutos después del gol de Mainz tuvo su chance más certera. El VAR llamó al árbitro Marco Fritz para mostrarle una falta dentro del área y cobró penal. Sébastien Haller tuvo en sus pies el empate, pero Finn Dahmen le tapó el remate. Al mismo tiempo, Bayern Múnich tuvo un tiro al poste de Pavard como para empezar a liquidar rápidamente el pleito.

Dos golpes fuertes para el Dortmund lo fueron llevando a mucho más nerviosismo. Las cosas no estaban saliendo como ellos esperaban y eso fue jugando en la cabeza de los futbolistas, que no lograban reaccionar. Para colmo, al minuto 24, Karim Onisiwo apareció solo en el punto de penal para cabecear y vencer a Köbel para un nuevo gol y el 2-0 del Mainz.

Edin Terzic no encontraba respuestas para su equipo y los futbolistas tampoco. Mainz comenzaba a internarse cada vez más atrás para aguantar el 2-0 a favor y eso complicó a un Dortmund, que no encontraba los espacios y el balón se le hacía cada vez más pesado de llevar. Finn Dahmen, para su mala suerte, también estaba en una gran jornada y tuvo una atajada clave al final del primer tiempo contra Brandt.

Del lado del Colonia-Bayern, el final del primer tiempo terminó con polémica luego de que Leroy Sané marcó el 2-0. Sin embargo, el gol fue anulado por una mano previa del alemán. Difícil decisión del árbitro Sven Jablonski, ya que Sané tenía la mano extendida, pero el balón estaba muy cerca como para que haya tenido intención.

Para la segunda mitad, el Dortmund tampoco podía cambiar la historia. Terzic tomó decisiones valiosas. Puso a un juvenil como Duranville, debutando en un partido oficial de Bundesliga, y a Gio Reyna para cambiar la historia. Esto revitalizó el ataque y tendría efecto rápido cuando Raphaël Guerreiro metió el 1-2 al minuto 69 de juego. Borussia se ilusionaba con dar vuelta el partido.

Mientras tanto, en Colonia, Bayern empezaba a sufrir y a resistir muy cerca de Yann Sommer. El local se lo ponía difícil con cada aproximación y los de Tuchel no podían aguantar el partido con el balón. Mientras tanto, el Dortmund iba con todo tras la reacción que hubo con el primer gol.

Y sobre el minuto 77 de juego, Gnabry se convirtió en verdugo. Extendió la mano de forma deliberada cuando venía un centro. El árbitro Jablonski cobró tiro libre, pero desde el VAR le hicieron cambiar la decisión: penal. Ljubicic lo cambió por gol para desilusionar todo Munich y hacer explotar Dortmund. El 1-1 le daba el título al Borussia, pese a la derrota.

Sin embargo, los últimos minutos del Dortmund no fueron de un equipo que realmente quiera salir campeón. No podían ante un Mainz que hasta le perdonó la vida en más de una oportunidad. Y, para colmo, Jamal Musiala hizo historia con un gol al minuto 89 para desatar la locura y el festejo de todos los bávaros.

El 2-1 definitivo le daba al Bayern la posibilidad del título, pero debía esperar a lo que ocurra en el Signal Iduna Park. En tiempo de descuento, Süle marcó el 2-2 al minuto 95. Sin embargo, no le quedó más tiempo a los de amarillo y negro. El árbitro marcó el final del partido. Desazón, al mismo tiempo del festejo del Bayern.

Bayern Múnich lo sufrió, pero se lleva el título in extremis por la rebeldía de un joven de 20 años con mucho futuro como Musiala. Y el Dortmund lo tuvo para terminar con esos diez años de títulos bávaros de forma consecutiva, pero falló.