Con más contundencia que el viernes pasado, Brasil volvió a imponer su supremacía ante la Selección argentina femenina de fútbol para quedarse con el clásico sudamericano, en el estadio José Américo de Almeida Filho por la continuidad de la Fecha FIFA. Hace tres días fue 1-3. Hoy, 1-4 que marca, a las claras, la superioridad del equipo brasileño, uno de los mejores elencos del mundo.

A los 19 del primer tiempo, tras un córner, Kerolin Nicoli Israel Ferraz apareció por el segundo palo y puso el 1-0 para empezar a dominar las acciones. Luego, a los 37, la vigente y legendaria Marta, de tiro libre, estiró la diferencia para poner 2-0 a la verdeamarela que, para ese momento, manejaba el partido a piacere.

En el complemento, antes de los 3 minutos, un centro de Myriam que, de cabeza y casi dentro del área chica, conectó Debinha para poner el 3-0 y dejar sin chances a la arquera argentina Laurina Oliveros. Tres minutos después, achicó diferencias Argentina. Mariana Larroquette atacó alto a una de las centrales, recuperó la pelota a la altura del semicírculo del área grande y con un puntazo marcó el tanto argentino.

No tuvo tiempo para acomodarse la Selección nacional. Marta, ¿cuándo no?, que manejó los hilos en todo momento, se puso en modo topadora y dejando a cuatro rivales por el camino y entrando por el medio, filtró un pase milimétrico para dejar a Yasmin, que definió cruzado de izquierda a derecha.

Una derrota que se explica en el talento inquebrantablede Marta. Una diferencia entre un equipo formado y rocoso ante una Selección argentina que está reacomodando sus fichas desde el desembarco de Germán Portanova en reemplazo de Carlos Borrello. Más allá del marcador, mejoró sensiblemente la Argentina en el complemento.

Con el ingreso de Florencia Bonsegundo, que volvió a vestir la celeste y blanca tras su conflicto con Borrello (no integraba el equipo desde el Mundial Francia 2019), el equipo mostró su mejor versión. Un revulsivo importante con vistas a lo que viene para un equipo que busca avanzar y crecer para arrimarse lo más posible a la elite. El gran objetivo de la Argentina es llegar con rodaje, juego y más entendimiento entre sus jugadoras a la Copa América del año próximo, competencia que decidirá la clasificación al Mundial de Australia y Nueva Zelanda 2023.

Por su parte, Brasil, conducido por la sueca Pia Sundhage, participó de los Juegos Olímpicos Tokio 2020 (Argentina no se clasificó) y apenas alcanzaron los cuartos de final al caer por penales ante Canadá, equipo que luego se consagró campeón olímpico.