La victoria 3 a 0 de Boca ante Patronato tuvo un gustito especial, porque el Xeneize se fue de Santiago del Estero con la sensación de haber recuperado a Darío Benedetto. El Pipa volvió luego de haber pasado 4 fechas suspendido y tuvo su noche soñada, convirtiendo un hat-trick.
Era importante para el 9 tener un partido como el del miércoles. Más allá de su gol a River, su último semestre había estado lejos de ser el soñado. Ahora se destapó y todo el Mundo Boca está feliz, incluido Juan Román Riquelme, que lo felicitó en el vestuario.
Tal como sucedió en cada uno de los seis títulos de su gestión, Román bajó a agradecerle a los futbolistas en el vestuario y allí se reencontró con el Pipa. Ambos se dieron un fuerte abrazo y la cuenta oficial del club se encargó de compartirlo en sus redes sociales. Para el hincha es una caricia.
Este abrazo entre el 9 y el 10 dice muchas cosas, pero principalmente demuestra que el clima interno es positivo y que las diferencias -si las hubo- quedaron atrás. Una de las peores imágenes de Benedetto se vio en aquella pelea por los premios antes de su noche faltal de Copa Libertadores. Hoy está todo bien.