Después de tomarse unos minutos para festejar que después de muchísimo tiempo su equipo había eliminado a River en un duelo mano a mano, los hinchas de Boca estallaron en las redes sociales contra Edwin Cardona por haber picado su penal cuando la cosa todavía no estaba definida, ejecutando tan mal que el arquero Díaz tuvo tiempo de tirarse y levantarse para sacar la pelota.
Muchas voces autorizadas también dispararon contra el colombiano, quien se habría disculpado en la práctica del lunes con sus compañeros, pero hubo uno más fuerte que todo el resto que salió a bancar a muerte a su colega: fue Sebastián Abreu, quien supo hacer lo mismo en un Mundial y terminó metiendo a Uruguay en las semifinales después de 40 años.
En diálogo con ESPN, comenzó: “¿El análisis que hizofue que era un pibe que llamaron aúltima hora o que era River el que estaba enfrente? Era un partido clásico, con la importancia que tiene, con la historia que tiene yésaerasumanera de colocar a Boca como ganador y dejando su marca de calidad”.
Y siguió: “No estoy de acuerdo con el pedido de disculpas, convictimizarse con estas situaciones,cuando son tomas de decisiones deportivas. Estádentro de las reglás. No debió hacerlo. Porque cuando va otro, le mete un fierrazo y la saca del estadio, ¿por qué no pide disculpas también?”.
Además, agregó: “Son opciones, decisiones,no hay que hacer un circo tipo velatoriopor un penal.La personalidad en el fútbol no pasa por trabar por la cabeza o romperle el arco. Desde hace mucho tiempo tomamos como vida o muerte un deporte que tiene que ser para disfrutar. Con responsabilidad, pero sin quitarle lo más sagrado: que es la impronta natural”.
Para cerrar, dejó en claro: “Es lo misma boludez que cuando vas ganando tirás un sombrerito y un caño y el rival se enoja con vos.Y… bancatelási estás perdiendo 3 a 0. Calentate con tu equipo que estás perdiendo por tres goles, no con el que te tira un caño”.