Juventus está edificando una temporada realmente turbulenta en la que no pudo clasificarse para los octavos de final de la UEFA Champions League y en la que está penando en el marco de la Serie A de Italia, donde, para colmo, recibió un fuerte castigo. Sin embargo, la Vecchia Signora no tiene tiempo para seguir lamentándose y debe recuperar el terreno perdido.

En ese contexto, este martes, el equipo comandado estratégicamente por Massimiliano Allegri viajó hasta el Estadio Arechi para encontrarse frente a frente con Salernitana por una nueva fecha de la máxima categoría del fútbol italiano. Lo hizo acumulando nada más ni nada menos que tres encuentros sin imponerse en dicho certamen doméstico.

En medio de ese panorama, el cuestionado cuerpo técnico liderado por el mencionado Allegri tomó la decisión de colocar a Ángel Di María desde el arranque. Paralelamente, la poderosa escuadra de la ciudad de Turín no pudo contar con la presencia de otro argentino como Leandro Paredes. Y la historia terminó con final feliz para Juventus.

Es que, de principio a fin y pese al mal momento que atraviesa, el equipo de Allegri se mostró muy superior a un conjunto cuya aspiración principal es evitar el descenso hacia la segunda división del fútbol italiano. Bajo esa órbita, Juventus se quedó con una muy buena victoria por 3-0 para calmar las aguas y escalar en la tabla de posiciones.

Dusan Vlahovic (26' y 47') se despachó con un espectacular doblete y fue la gran figura que tuvo el partido en el sur de Italia. Por su parte, Filip Kostic (45') marcó el otro gol del combinado vencedor. Cabe destacar que Di María fue reemplazado cuando se jugaban 17 minutos de la etapa complementaria, dejándole su lugar a Federico Chiesa.