El retiro de Zinedine Zidane luego de la Copa del Mundo 2006 dejó un hueco enorme en Francia. El seleccionado se quedó sin su capitán; el país, sin su máximo referente. Una leyenda terminó su carrera, y los medios iniciaron en la búsqueda de su sucesor.
Por aquellos tiempos, una joven promesa comenzaba a dominar el centro del campo en la Ligue 1 con su elegante estilo, gran visión de juego y una habilidad superlativa. Su nombre, Yoann Gourcuff, y con su salto al AC Milan, todos los ojos se comenzaron a posar sobre él.
Tres millones fue lo que pagó el rossonero por quien los medios comenzaron a llamar “el pequeño Zidane”, quien pasó a estar bajo la tutela de algunos de los mejores volantes del siglo. Gourcuff pudo aprender de primera mano de los Andrea Pirlo, Clarence Seedorf, Kaká o Gennaro Gattuso. Mediocampistas de todos los estilos, y número uno en lo suyo.

Gourcuff fue parte de uno de los equipos más destacados de la historia, el Milan de mediados de los 2000’s.
En esa primera temporada de Gourcuff en Milan, los dirigidos por Carlo Ancelotti ganaron la Champions League. Posteriormente conquistaron la Supercopa de Europa y el Mundial de Clubes ante Boca. Sin embargo, Gourcuff no se ganó nunca a Ancelotti, quien puso en duda su profesionalismo y la seriedad con la que se tomaba el fútbol.
Paolo Maldini fue crítico con Gourcuff
“Gourcuff en Milan fue un error, al 100%. Su problema aquí fue su comportamiento. No mostró ser capaz de comportarse de forma inteligente. Cuando estuvo aquí, nunca estuvo predispuesto con el plantel”, declaró el histórico capitán del Milan, Paolo Maldini, en diálogo con L’Equipe.

Yoann Gourcuff (abajo derecha) en uno de los mejores planteles de la historia.
“No sabía italiano, no trabajaba, no llegaba en horario. Pasaron muchas cosas, cosas que no puedo decir. Pero él sabe lo que hizo”, continuó Maldini. Y completó: “Cuando entraba, no se entregaba al máximo. Jugadores menos talentosos se han ganado el respeto en Milan porque lo daban todo. Él, él no lo hacía. Y él lo sabe. Se terminó separando del grupo.”
Su regreso a Francia, la vuelta a su mejor nivel y el elogio de Zidane
En Milan no se halló, y en 2008 Gourcuff regresó al fútbol de su país. El Girondins de Burdeos le abrió las puertas y su impacto fue inmediato. Gourcuff volvió a demostrar por qué se lo comparó con Zidane, y lideró al club a ganar su primera Ligue 1 en casi una década, fue elegido el mejor jugador francés del año en 2009, por sobre Ribery y Henry y acalló a sus críticos.
“Para dar lo mejor, necesitaba un entorno donde se sintiera en casa, con confianza y querido“, reconoció años más tarde su ex compañero Alou Diarra, campeón junto a Gourcuff en aquella recordada liga. “Eso lo tenía en Burdeos, encontró un marco extraordinario y protector, y un equilibrio en su vida”.

Jugó el Mundial 2010 pero no logró demostrar lo que había hecho en Frnacia.
Gourcuff se ganó un lugar entre los titulares de la Selección de Francia en el Mundial de Sudáfrica 2010. Pero el equipo de Deschamps fue la decepción del torneo y se quedó afuera en primera ronda, tras una derrota ante el combinado local. Aún así, luego de la eliminación en la que el volante fue expulsado, Zinedine Zidane salió a respaldarlo.

Con Domenech no encontró su mejor nivel, luego llegaron las lesiones en Lyon.
Con la destitución de Deschamps, y la elección de Laurent Blanc para ocupar el lugar de seleccionador, Zidane confió en que Gourcuff mostraría su mejor nivel con Francia. “Tendrá la posibilidad de lograr su mejor nivel con la llegada de un entrenador que le conoce bien y que sabe ponerlo en las mejores posiciones. Para mí Yoann representa el futuro del equipo de Francia“, destacó el histórico. Ese día jamás llegó.
Su paso a Lyon, las lesiones y el retiro
22 millones puso Lyon por Gourcuff luego de su campaña como líder en el Burdeos y su titularidad en el Mundial. En su primera temporada fue titular indiscutido, pero luego las lesiones comenzaron a afectarlo. Primero su tobillo, luego una rotura de ligamentos en su rodilla y tras ello llegó una pubalgia que lo apartó de las canchas.

Las lesiones afectaron la carrera de Gourcuff en la parte final.
Con todo ese historial, Lyon no le renovó y en 2015 Gourcuff quedó libre. Allí apareció su primer club, el Stade de Rennes, que le dio una nueva oportunidad. Tres temporadas estuvo el francés en el club, pero con un nivel muy por debajo del esperado. Una vez más quedó libre, y terminó su carrera tras seis meses en el Dijon.
“Yoann Gourcuff tenía el talento para jugar en el Real Madrid, pero la mentalidad para jugar en el Lorient”, sentenció categóricamente su ex compañero Benoit Costil, con quien compartió equipo en Burdeos y Rennes. Posiblemente una frase que resume toda la carrera de Gourcuff en pocas palabras.







