A lo largo de su carrera, antes de ser la figura que es hoy, Emiliano Martínez tuvo varios golpazos que le fueron forjando una fuerte personalidad que hoy lo destaca. Uno de ellos llegó cuando apenas tenía 12 años de edad, un rechazo por parte de River y Boca que casi lo lleva a dejar todo.
Traído a la gran ciudad por Jorge Peta, Emiliano Martínez estuvo a prueba en el Millonario y en Xeneize y soñaba, gracias a su buen rendimiento, con quedar en algunas de las instituciones más grandes del país. Sin embargo, ambas lo rechazaron por un motivo similar que hoy se paga caro.
En primer lugar, su prueba por River fue buena pero no del todo para convencer al Millonario de darle al arquero un lugar en la pensión del club: "Nos dijeron que tenían jugadores más o menos como él", soltó Peta en diálogo con Infobae sobre el pasado de una de las personas más queridas de la Argentina en este momento.
Si bien esto fue un bajón importante para el arquero, la verdadera decepción llegó durante su estadía en Boca ya que la misma duró poco más de una semana. Esfuerzos que finalmente no dieron su fruto ya que el Xeneize terminó fichando a un arquero recomendado por un entrenador del club.
Las dos negativas pegaron fuerte a Martínez según Peta ya que este se vio "desilusionado". Sin embargo, el Dibu encontró su lugar en Independiente gracias a que Miguel Ángel Santoro lo quiso apenas lo vio. Incluso, el Rojo ya lo había buscado dos años antes por medio de Bochini durante un torneo juvenil en Mar del Plata.
