Jaime Munguía es ese boxeador capaz de ganarse un reconocimiento tal a nivel mundial en el boxeo, como de ponerlo en duda y en riesgo en cuestión de horas. El mexicano perdió este sábado 14 de diciembre de manera insólita ante el francés Bruno Surace, quien le propinó un brutal nocaut en el sexto asalto en Tijuana y dejó en la cuerda floja a un pugilista nacional que ahora tiene más dudas que certezas.

Munguía estaba ante la posibilidad de lucirse ante su gente, quedarse con la victoria ante un rival que no tiene pergaminos en el deporte y cerrar un gran año, pensando en que en el 2025 tendrá la oportunidad de enfrentar al francés Christian Mbilli por el cinturón interino del CMB del peso supermediano. El éxito no llegó y las preguntas comenzaron a reproducirse por doquier y es que nadie esperaba ver en la lona al bueno de Jaime.

El combate comenzó con un Munguía que tiró a su rival en el segundo round y parecía que tenía todo listo para terminar con la mano en alto, pero cuando menos lo esperaba terminó viendo como el árbitro le paraba la pelea porque estaba noqueado. Enseguida lo que se pensó fue: ¿Tiene verdaderamente Munguía lo necesario para ser una estrella del boxeo? En este deporte no existen tantas segundas oportunidades, por lo que los errores se pagan muy caros. Esto hace que el futuro del mexicano se vuelva más que interesante porque todos desearán ver como se recupera de una caída tan dura.

Así fue el brutal nocaut que sufrió Jaime Munguía por Bruno Surace

Lo que puede sufrir Jaime Munguía tras perder con Bruno Surace

En la previa de este duelo habíamos dicho que Jaime estaba ante la pelea más importante de su vida y no por lo deportivo, sino por lo que se jugaba por fuera dentro del cuadrilátero. Ese reconocimiento que necesita Munguía para tener un respaldo del público mexicano mientras sigue haciendo crecer su carrera es vital, pero algo se rompió tras ser noqueado por Surace.

El deporte es tan cruel que se puede pasar de héroe a villano en apenas unos segundos y esto es algo de lo que Munguía debe tener mucho cuidado. Claro que la derrota en México es fuerte, más cuando ese desenlace no estaba en los planes de nadie, pero es parte del pugilismo y ahora todo depende de Munguía.

Jaime deberá demostrarle al mundo que tuvo un accidente que le puede ocurrir a cualquiera y que esto no le va a quitar el foco de lo que más desea que es consagrarse como campeón del mundo en el peso supermediano. Si no lo hace, entonces le dará la razón a quienes creen que su nombre figura mucho más de lo que demuestra en verdad y allí estaríamos en un problema, porque sería perder a una estrella que prometía brillar por mucho tiempo. Munguía tiene tiempo de acomodar las cosas y solamente él puede llevar su carrera a lo más alto.