En medio de los escándalos vividos entre semana por una asamblea que pasará a la historia como una de las vergonzosas en la historia del club y con la crisis del Covid-19 azotando al equipo, Bayern Múnich respira con calma luego de derrotar al Arminia Bielefeld por la Bundesliga gracias a un Leroy Sané que apagó un nuevo incendio en el Allianz.

La polémica se ha tomado Múnich. No solo por las diversas posturas de los futbolistas ante la vacuna del coronavirus en plena ola de contagios en Alemania, sino también por una directiva que recibe cada vez más palos de la prensa y los socios gracias a su cercanía con Qatar. Con un ojo puesto en Borussia Dortmund y Barcelona por la Champions League, Bayern recibía al Arminia en un Allianz que no tuvo más del 15% de su aforo gracias a la pandemia.

La victoria de los amarillos en Wolfburgo obligaba al Bayern a quedarse con un choque donde si bien pudo dominar de punta a punta, tuvo que sufrir y mucho para llevarse los tres puntos. Hasta 20 remates (11 a puerta) tuvieron los pupilos de Julian Nagelsmann en un encuentro donde solo un golazo de afuera del área de Leroy Sané a falta de 20 minutos pudo romper la resistencia de Stefan Ortega.

Semana clave

El futuro del Bayern apunta a Der Klassiker y la Champions. Los muniqueses buscarán defender la punta de la Bundesliga el próximo sábado en un Signal Iduana Park que todavía no sabe si las medidas contra la pandemia permitirán un lleno completo del muro amarillo. En Baviera empiezan a preparar un encuentro que contará con Erling Haaland desde el arranque.

Solo tres días más tarde, Bayer Múnich tendrá que recibir a un Barcelona que tendrá que ganar en el Allianz para no depender de otros resultados pensando en octavos. Las críticas hacía el rey de la Bundesliga tanto dentro como fuera del terreno de juego obligarán a Lewandowski y compañía a sumar 6 de 6 en una semana que servirá como termómetro de una hinchada más que enojada con su directiva.