Liverpool está en la final de la FA Cup. Una gran demostración de fútbol, sobre todo, en el primer tiempo destruyó a un Manchester City debilitado. Dos goles de Sadio Mané y uno de Ibrahima Konaté le dieron el triunfo a los 'Reds' por 3-2 en semifinales. Jack Grealish y Bernardo Silva descontaron para el equipo de Pep Guardiola, que equivocó el planteo inicial y se quedó con las manos vacías. Para los de Jürgen Klopp toca esperar en la definición por Chelsea o Crystal Palace, que juegan este domingo.

El primer tiempo sentenció lo que fue el partido. Los 'Reds' lo jugaron de manera perfecta y dando una gran clase de cómo presionar a un equipo como el Manchester City de Pep Guardiola. No lo dejó salir fácil y le cortó todos los circuitos de juego posible. En esto, también ayudó el primer gol antes de los diez minutos. Un cabezazo de Konaté tras un córner de Robertson puso el 1-0. El francés, de ascendencia maliense, venía de anotar en los dos partidos de Champions League ante Benfica, y vuelve a hacerlo ahora ante los 'citizens'.

La presión de Liverpool en los minutos siguientes fue asfixiante. Fernandinho, Bernardo Silva y Foden no podían recibir con ventaja y la pelota solo pasaba por los defensores, que trataban de dar la salida, pero recurrieron constantemente al pelotazo. Hasta que al minuto 17, llegó el grave error de Zack Steffen, presionado por Mané, quien gracias a su presión convirtió el 2-0.

El partido siguió con la misma sintonía. Liverpool lograba robar rápido el balón y también le daba movimiento con Thiago y Naby Keita en el medio y con su tridente de ataque, bien al acecho para tratar de aprovechar. Al 'City' le urgía poder terminar el primer tiempo para hacer ajustes. Pero, volvió a aparecer Mané con un 'sablazo' espectacular para vencer a Steffen nuevamente, marcando el 3-0. Doblete del senegalés para llegar a su tanto número 18 de la temporada.

Guardiola hizo ajustes en el entretiempo, pero sin hacer cambios. Y esto tuvo efecto en el comienzo del segundo tiempo. En la primera jugada clara que tuvo en todo el partido, Gabriel Jesús se escapó de derecha al medio y le dio un buen pase a Grealish, que definió de buena manera para poner el descuento 1-3. El gol parecía animar un partido que dominó por completo Liverpool en el primer tiempo, pero al que aún le quedaba otros 45 minutos. Los fanáticos de Manchester City confiaban en llegar al empate.

Oportunidades no le faltaron al equipo de Guardiola para poder llegar al 2-3. De hecho, Gabriel Jesús tuvo un par, sobre todo un mano a mano clarísimo, pero las rápidas salidas de Alisson lo evitaron. Conforme fueron pasando los minutos, Liverpool se fue acomodando más y acariciaba la final de la FA Cup. Salah y Mané siguieron generando peligro con aproximaciones para llegar al cuarto tanto.

Sobre el minuto 90, apareció el tan esperado descuento con el gol de Bernardo Silva para poner el 2-3. Esto dejaba unos últimos minutos más que emocionantes y con chances para los 'citizens' para llegar al empate. Primero, una chance clarísima de Fernandinho de frente al arco, pero que no pudo convertir, Mahrez también lo tuvo con un remate que rebotó y se fue al córner, y otra de Sterling, que Alisson atajó de buena manera abajo. Final apasionante e inesperado, pero que no cambió el finalista. Liverpool llega a la definición de la FA Cup de forma merecida y espera por Chelsea o Crystal Palace.