Boca tuvo una noche para el olvido en Liniers. No jugó bien, perdió ante Vélez y, como si fuera poco, la salida de Marcos Rojo no dejó buenas sensaciones.

A lo largo del encuentro, el defensor central no mostró complicaciones físicas, pero sí cuando se retiró del vestuario en el José Amalfitani: salió rengueando.

Según informó Juan Simón en ESPN F10, “Marcos Rojo tendría una lesión en el gemelo y mañana (lunes) le harán estudios. Temen que sea un desgarro”. Claramente, el panorama no sería muy alentador.

En la cara de Rojo se veía muchísima deshazón, además de bronca y gestos de dolor al caminar. Y más allá de que esperarán los resultados de los estudios, en el caso de ser un desgarro, se quedaría afuera de las canchas por los próximos 21 días.

Después de la lesión de Marcelo Weigandt, quien sufrió una luxación en el hombro, la posible ausencia de Rojo para lo que se le viene al Xeneize, complicaría el armado del equipo para Sebastián Battaglia.