Este miércoles, la actividad relacionada con la presente temporada de la novedosa y renovada UEFA Champions League siguió su marcha. En ese contexto, la misma ofreció una función muy esperada entre dos pesos pesados del continente europeo.

Es que, con el territorio portugués como escenario, Benfica recibió a Atlético de Madrid en Lisboa. Lo hizo con el objetivo impostergable de hacerse con tres puntos realmente importantes en su estadio y con una gran cantidad de público a favor.

Así las cosas, las Águilas no demoraron demasiado en encontrar la apertura del marcador. Lo hicieron cuando transcurrían jugados 13 minutos del primer tiempo por intermedio de Kerem Aktürkoglu. Y más tarde llegó la anotación de Ángel Di María.

Sucede que, a los siete minutos de la etapa complementaria, el árbitro, a instancias del VAR, sancionó un discutido penal en favor de Benfica. Y quien se hizo cargo de la ejecución de la pena máxima fue el propio argentino, quien no falló.

El campeón del mundo con la Selección Argentina en Qatar 2022 abrió el pie y colocó el esférico pegado al palo derecho de Jan Oblak, portero de Atlético de Madrid quien no pudo hacer absolutamente nada para evitar la segunda caída su valla.