Corría el año 2001 y el Atlético de Madrid pasaba uno de sus momentos más duros, ya que se encontraba en segunda división. Sin embargo, el 27 de mayo de ese año debutaría quien se convertiría en una de las máximas glorias y en el encargado de devolverle la sonrisa a la afición: ‘El Niño’, Fernando Torres.
El Vicente Calderón se estremeció por primera vez en mucho tiempo cuando ese prometedor delantero un tanto flaco y que todavía tenía algunos centímetros por crecer para llegar al metro ochenta y pico que mide hoy en día. En fin, una semana después de su debut, anotaría el primero de sus 130 goles con el Colchonero.
Ese año recuperaron la categoría, consiguiendo el campeonato de la Segunda División y regresando al lugar del que nunca deberían haberse ido. Y Torres comenzaba a deslumbrar. Tal es así que fue convocado a la Selección Española en 2003, para iniciar el camino de esa camada posterior a Corea-Japón que una década más tarde tendría dos Eurocopas y Mundial en sus vitrinas.
Un joven Fernando Torres junto al Cholo Simeone en sus primeros años en Atlético de Madrid.
Su paso al Liverpool y su traición a los Reds
Un 0-6 ante Barcelona en Fuenlabrada fue la gota que derramó el vaso y El Niño entendió que necesitaba salir del Atleti. ¿Su rumbo? La Premier League. El Liverpool lo quiso y por 30 millones, se hizo con un delantero marcado en la historia de los Reds.
81 goles en 142 partidos, una sociedad brillante con Steven Gerrard y un status de figura indiscutida del club eran los pergaminos de Fernando Torres, antes de tomar una drástica decisión: fichar por el Chelsea.
Fernando Torres dejó el Atlético para jugar en Liverpool, donde marcó una época.
“Me hubiera gustado salir de otra manera, sobre todo, creo que jugando tres años y medio de la manera en que he estado, siendo tan feliz y haciendo tan feliz a la gente, me habría gustado más que hubiera sido una salida como la que tuve en el Atlético de Madrid”, declaró al llegar al Chelsea en 2011 a cambio de más de 50 millones de libras.
Los fanáticos del Liverpool no lo entendieron, pero con el diario del lunes, podemos ver que fue la opción correcta. El Niño, que ya era campeón de Europa y del Mundo con España, ganó sus primeros títulos a nivel clubes. Sí, tardaron 10 años desde su debut, pero finalmente llegaron.
Los títulos con Chelsea, su paso por Milan y el regreso al Atleti
No se puede decir que el paso del Niño Torres por Chelsea fue el mejor de su carrera, pero sí el más exitoso. Jugó 170 partidos y apenas anotó 45 goles, números pobres para su capacidad, pero los títulos llegaron.
La primera conquista fue la Champions League, ni más ni menos, en la Temporada 2011/12. Ganó la FA Cup en ese mismo año y al finalizar la siguiente temporada, también sumaría a su palmarés una Europa League.
Con el Chelsea ganó la Champions League en su segunda temporada.
No obstante, su rendimiento lo hizo perder lugar en el Chelsea y tuvo un corto paso por el AC Milan para cerrar la temporada 2014/15, antes de volver a la casa que lo vio nacer: el Atlético de Madrid.
Finalmente, el Niño Torres se daría el gusto de conquistar un título de primera división con el Colchonero; fue la Europa League 2017/18, en su última temporada con el club. Su retiro se dio tras dos temporadas en Japón, con el Sagan Tosu.
Dejó una marca en la Selección
Ahora bien, todo lo que “no ganó” a nivel clubes, lo conquistó con La Roja. Desde su debut y hasta su retiro, el Niño jugó 110 partidos con el seleccionado de España, convirtió 38 goles y fue el goleador de la Eurocopa 2012.
Junto a David Villa conformó una delantera fantástica y fue clave en la conquista de los tres títulos que obtuvo la Selección Española de forma consecutiva: la EURO 2008, la Copa del Mundo 2010 y la EURO 2012.
Su gol ante Alemania en la final de la EURO 2008 es historia pura de la Selección Española. Imago
Qué es de la vida del Niño Torres hoy
Fernando Torres colgó los botines en 2019 e inmediatamente se dedicó a formarse para ser entrenador. Y así lo hizo, aunque su carrera en los banquillos y en los campos de entrenamiento no ha ido más allá de las categorías formativas de su querido Atlético de Madrid, donde trabaja desde 2021.
Con su regreso a España, el Niño también hizo una transformación física que hace que aquel mítico apodo que lo acompañó durante toda su carrera parezca una burla. Una combinación de hipertrofia, boxeo y especialmente una buena alimentación lo han llevado a incrementar notablemente su masa muscular y cambiar completamente su apariencia.
El cambio físico del Niño Torres.
En consonancia con ello, abrió una cadena de gimnasios llamada ‘Nine Fitness’, la cual cuenta con varios centros por toda la Comunidad de Madrid, y donde el propio Torres entrena.
Sus goles y títulos con la Selección Española lo han transformado en el ídolo de una generación que hoy en día sigue celebrando los títulos obtenidos por aquel fantástico equipo de finales de los 2000’s y comienzos de los 2010’s que lo ganó todo para España.