Siendo consciente de la victoria de San Lorenzo de Almagro como visitante de Atlético Tucumán, River Plate salió al campo de juego del estadio Tomás Adolfo Ducó con la misión de volver a sacar cuatro puntos de diferencia en la cima.
Para el peligroso cotejo como visitante de Huracán, Martín Demichelis, director técnico del elenco Millonario, dispuso nada menos que cinco cambios, decretando el ingreso de Milton Casco, Leandro González Pirez, Ignacio Fernández, Esequiel Barco y Salomón Rondón.
Precisamente, el experimentado delantero venezolano sería claro protagonista durante el tramo inicial del partido en el barrio porteño de Parque de los Patricios. Y así le puso punto final a su sequía desde que llegó a los de Núñez.
Es que, en los primeros instantes del primer tiempo, Rondón recibió una extraordinaria asistencia de Lucas Beltrán, que dejó al venezolano mano a mano con el arquero. Allí fue cuando el delantero fue víctima de un claro penal.
Posteriormente, el internacional con el seleccionado de su país se hizo cargo de la pena máxima: cuando transcurrían jugados 11 minutos del primer tiempo abrió el pie y estampó el 1-0 de los de Demichelis en la casa de Huracán.