Imagínense a Gennady Golovkin el próximo 7 de mayo, sentado en la primera fila de la T-Mobile Arena de Las Vegas para relamerse mientras observa la pelea entre Saúl El Canelo Álvarez y Dmitry Bivol. El kazajo hizo su tarea. Demolió a Ryota Murata en su propia casa y demostró que pese a haber cumplido ayer los 40 sigue perteneciendo a la élite del boxeo mundial.

Hace un año atrás, cuando al Canelo se le había preguntado por milésima vez sobre la posibilidad de realizar la trilogía de combates ante Triple G, este había dicho que su momento ya había pasado y que le sería muy sencillo derrotarlo ahora. De hecho, las presentaciones de Golovkin ante Sergiy Derevyanchenko y Kamil Szeremeta, aunque saliendo victorioso, bien podían darle la razón al mexicano.

Mucho se habló de que el kazajo ya no era el de antes, pero su victoria ante Ryota Murata hará que muchos se replanteen el hecho de haber sido tan tajantes al hablar de un peleador que tiene el gen destructor en sus puños. Lo sufrió el japonés, quien terminó arrodillado sobre la lona y completamente aturdido en el noveno asalto.

La realidad es que con una victoria como la que Golovkin concretó en Japón sin dudas ganará créditos a la hora de que se eleboren los favoritismos para una trilogía que está prevista para septiembre. Antes, Canelo deberá derrotar a Dmitry Bivol, en un combate que pondrá en juego el título mundial de peso semipesado de la AMB.

Eddie Hearn ya quiere que suceda a trilogía

El promotor británico Eddie Hearn, quien fue precisamente quien firmó el contrato con Canelo Álvarez para que enfrente a Bivol en mayo y a Golovkin en septiembre, no tardó en reaccionar en las redes sociales a la gran victoria del kazajo. "¡Qué pelea! Después de 400 días fuera del ring y un comienzo lento, Gennady Golovkin brutaliza a Murata en Japón para unificar la división. Todos los ojos están puestos ahora en Canelo vs Bivol", escribió en Twitter.