Philaldelphia Eagles ha sido la grata sorpresa de la National Football League (NFL), ya que no tenía tantos reflectores durante la temporada baja, pero se han convertido rápidamente en uno de los candidatos a ganar el Super Bowl en 2023.
Parte de eso ha sido el gran desempeño de su mariscal de campo, Jalen Hurts, quien ha dado el paso hacia adelante en su segunda campaña como titular en el equipo y es uno de los principales responsables de que los Eagles estén donde están.
Pero, y si bien el juego de su mariscal ha sido superlativo, ha tenido buenas armas a su disposición para poder guiar a una ofensiva que parece de las mejores de la liga. Es justamente un récord de franquicia en el ataque lo que podría llevar a Philly a la gran final de la NFL.
Los receptores de los Eagles, ¿La razón por la que llegarán al Super Bowl?
Las adquisiciones durante la temporada baja de los receptores Devonta Smith (seleccionado en la primera ronda del NFL Draft) y AJ Brown (intercambiado por un pick también de primera ronda con Tennessee Titans) ha dado sus frutos en Philadelphia.
Este dúo de WRs se ha convertido en el primero en la historia de Philadelphia Eagles en superar las 1.000 yardas por aire en la misma temporada. La ofensiva aérea de los de Nick Sirianni, tal vez la más poderosa de la NFL.
