No quedan dudas que en Boca las noticias referidas al mercado de pases son más que positivas. Con la confirmación del propio Benedetto de que llegará al país el próximo jueves, donde se hará la revisión médica y firmará el contrato por 3 años con el club, junto a la afirmación del Consejo del Fútbol del fichaje de Nicolás Figal y el avance positivo en las negociaciones por Pol Fernández, da como conclusión que el mercado le sonríe al Xeneize.

Esto significa un gran alivio en referencia al mercado anterior, donde se intentó desde el cuadro ubicado en Brandsen 805 traer más jugadores de jerarquía que los que terminó´concretando pero no pudo hacerlo porque varias negociaciones se vieron afectadas por los elevados precios que pretendían los clubes con los que entablaban conversación.

Uno de los más particulares casos de esto fue con Elías Gómez, el lateral izquierdo de Argentinos Juniors. Hace solo seis meses, Boca lo fue a buscar para reforzar la zona donde Frank Fabra tiene su nombre escrito hace años en el club, pero por su bajo rendimiento por aquellos tiempos le daban al Xeneize la duda de si era necesario contratar alguien que compita con él, con Gómez como casi único apuntado.

Sin embargo, toda ilusión de contar con él en Boca se esfumó cuando el Bicho de La Paternal le hizo saber lo que pretendían por su salida: 8 millones de dólares. Para tomar consciencia, la compra más cara de la historia del Xeneize fue Iván Marcone, por quien se pagó 7,5 millones de dólares, lo que hacía algo utópico para el mercado ese precio por el lateral de Argentinos.

Lógicamente, Boca desistió automáticamente de contratarlo porque iba a ser imposible tenerlo, ya que desde el Xeneize pretendían pagar como mucho 2 millones de dólares, lo que ofrecieron por él en el mercado de julio del 2021.

Seis meses después de esa infrutuosa negociación, Argentinos nuevamente recibió ofertas por él e, increíblemente, pusieron un techo mucho más bajo en las negociaciones. Independiente y Colón son los equipos que lo pretenden actualmente, y la directiva del Bicho fue clara: les comunicaron a ambos que quieren 2 millones de dólares por él. Si, lo mismo que ofertó Boca hace escaso tiempo. Por fortuna para el Xeneize, Fabra levantó su rendimiento y encontró dos competidores para él desde las inferiores con Sández y Barco.