La historia de por qué nunca había levantado la copa del Mundo la había contado su hijo en plena cuarentena. En abril del 2020, Daniel Valencia Junior, hijo del Rana Valencia, contó a través de las redes sociales por qué su papá no había estado presente en la premiación cuando Argentina se coronó campeón del mundo por primera vez en 1978. No había levantado la Copa. Sin embargo, 44 años después, otra vez con el trofeo en Argentina, aquel 10 de la Selección la tuvo en sus manos y ya sabe también cuanto pesa.

Una escapada a su casa

En un extenso hilo de Twitter, el más joven de los Valencia (tiene tres hermanas más) relató que su padre, que en ese entonces tenía apenas 22 años, no estuvo presente en los festejos por la obtención del Mundial. "Este tipo tuvo la particularidad de salir campeón del mundo y -en lugar de quedarse a festejar- se escapó de la cancha, del hotel y se volvió a sus pagos para abrazar a su mamá". Sí, el 10 de aquella Selección no levantó la Copa.

"La Selección Argentina había concentrado desde mediados de enero para lo que sería la cita mundialista. Si bien, los sábados les permitían viajar con sus respectivos equipos, apenas finalizaba el encuentro, debían volver para la concentración en Buenos Aires (...) Habían pasado casi 6 meses sin ver a su familia. Mi abuelo falleció cuando mi viejo tenía 15 años, a los 16, el ya se fue de su casa para jugar profesionalmente y ya quedar instalado en Córdoba", contó en aquel entonces sobre las razones que lo llevaron a su padre a elegir ver a su mamá antes que los festejos.

"Profe, gracias por todo. ¡Somos campeones del mundo! Vine rápido al hotel antes que se llene de gente, ya me voy a casa a ver a mamá. Despidame de todos. Abrazo enorme", fue la carta que el Rana le dejó en el hotel al Profe Pizzarotti, quien lo buscaba preocupado entre tanta algarabía. Y encaró para Jujuy, su provincia natal, donde vivía Blanca, su madre (la abuela de quien relató la historia).

El camino del campeón

El relato sobre su "escape" tiene una vuelta más. En el camino, eso 1500 kilómetros hasta San Salvador, lo fueron reconociendo los gendarmes y la noticia llegó desde Tucumán: Daniel Valencia estaba yendo a festejar con los suyos. "El gobierno jujeño tomó nota de la situación y, decidió declarar asueto para que el pueblo jujeño pueda ir a recibir a su héroe". Sin embargo, el Rana decidió tomar un camino de tierra para llegar a su casa y no la avenida principal, donde le habían preparado la bienvenida. El problema fue, claro, que cuando llegó a su casa, tampoco estaba su madre, que se había sumado a la muchedumbre para recibirlo. 

La familia primero

Privilegiar ir a ver a su madre en vez de celebrar la obtención del Mundial ("La abracé a la abuela como 2 horas, y eso fue mejor que todo", explica su hijo sobre el encuentro con Blanca) no es el único gesto de este calibre que se viralizó. Y otra vez dejó en claro que sus afectos están primero: durante Qatar 2022 el Rana rechazó la invitación de la FIFA para presenciar la final de la Copa del Mundo en el estadio Lusail. 

Hijo, ya gané uno, me emociona mucho más saber que puede volver a pasar con ustedes a mi lado”, le respondió cuando Daniel Jr, molesto por que su padre no quiso viajar, le reclamó por su negativa. "La situación es más o menos así: desde que tengo uso de memoria veo los partidos con mi viejo. Todos los partidos con mi viejo. Uno de los 2 se encarga de preparar el mate unos 15 minutos antes de cada partido y el otro se va a comprar unos criollitos o galletas", agregó. De eso se trataba, compartir ese momento único con su familia y no en un estadio ajeno.

El primer encuentro con la Copa

En 2006, Coca Cola y la FIFA firmaron un convenio y realizaron el primer Trophy Tour: por primera vez la Copa del Mundo iba a visitar 31 países antes de aquel Mundial, que se iba a jugar en Alemania. En aquella visita tras el acuerdo comercial fue que Valencia la tuvo cerca otra vez. "Algún evento lo acercó a la Copa pero todo era muy forzado, gente de traje sin sentimiento alguno ni gratitud por lo logrado", contó su hijo.

El sueño cumplido

Llegó el momento tan esperado. "Ayer, después de 16288 días, se cerró un ciclo. Una historia y un amor que me desborda el pecho de orgullo. 44 años, 7 meses y 3 días", escribió, una vez más, el menor de los Valencia en sus redes.

De aquel 25 de junio de 1978 a este 29 de enero de 2023. Talleres recibió a Independiente por la primera fecha del torneo y, como ocurrirá en todos los partidos de la Liga Profesional, estuvo presente la réplica de la Copa del Mundo para seguir celebrando la tercera estrella. Y quienes la ingresaron al campo de juego del Kempes fueron, justamente, Daniel Valencia y Miguel Oviedo, campeones del 78.  

 

"Después de haber salido campeón del mundo, ayer levanté la copa por primera vez en mi vida, frente a mi gente, en mi casa y con mi familia. Soy un agradecido, no sé muy bien quién escribió la película de mi vida pero afortunadamente tiene un desenlace feliz", escribió el propio Rana en su cuenta.

A veces, dicen, las historias tienen finales felices.