A cuatro años de haber sorprendido al mundo del tenis y consagrarse campeona del US Open con apenas 18 años, Emma Raducanu atraviesa un presente distinto. Con 22 años, la británica ocupa hoy el puesto 39 del ranking WTA y continúa en la búsqueda de recuperar las sensaciones que la llevaron a tocar el cielo en Nueva York. Tras un recorrido marcado por altibajos y la presión mediática que la rodeó desde su irrupción, Raducanu intenta reencontrarse con su mejor versión.
En paralelo a su camino deportivo, la tenista volvió a estar en el centro de la atención en estos días, aunque no por su tenis. En una entrevista con The Guardian, se sinceró sobre un aspecto personal que todavía la condiciona fuera de la cancha: el miedo que le dejaron dos episodios de acoso que marcaron su vida en los últimos años.
“Fue lo peor que he pasado con alguien del público. Después de eso me costó mucho salir a la calle. Desde ese entonces, intento siempre tener alguien a mi lado, no salgo mucho sola ni tampoco doy paseos sola. Siempre tengo a alguien que me vigila por la espalda”, confesó Raducanu, al recordar especialmente el hecho más reciente. El mismo se produjo en febrero de este año, en Dubái, cuando una persona obsesionada con ella, que la venía siguiendo por cuatro distintos distintos, apareció en la tribuna durante un partido, lo que derivó en su expulsión.
El primer episodio ocurrió en 2021, cuando un hombre fue condenado tras robar objetos de la puerta de su casa y terminó recibiendo una orden de alejamiento por cinco años.

Raducanu ganó el US Open con 18 años (Getty Images).
Más allá de esa dura experiencia, la británica enfoca ahora todas sus energías en Flashing Meadows, el escenario donde alcanzó la gloria y que volverá a recibirla en un nuevo US Open. En búsqueda de estabilizarse físicamente y con la ilusión de consolidarse otra vez entre las mejores del circuito, Raducanu busca dar vuelta la página y recuperar la confianza.
Una de las cuestiones que podrían beneficiarla para centrarse absolutamente en la raqueta es la dupla que hará con Carlos Alcaraz en el cuadro mixto del Grand Slam estadounidense. Aunque, la exposición mediática de ambos llevó a que crezcan las especulaciones sobre una relación entre ambos, especialmente luego de formar parte de compartir un acto promocional.
“Ojalá nunca hubiera ganado el US Open”
Dentro de los altibajos que sufrió en su carrera, Raducanu también reconoce el costo que trajo consigo el título en Flushing Meadows. Al principio fue todo color de rosas, hasta que las expectativas sobre su tenis crecieron a mansalva. Sin ir más lejos, en el año 2023 llegó a declarar en diálogo con The Times: “Desde entonces, he tenido muchas recaídas, una tras otra. Soy resiliente y mi tolerancia es alta, pero no es sencillo. A veces, pienso para mí misma: ´Ojalá nunca hubiera ganado el US Open, desearía que no hubiera pasado´”.

ver también
Anna Kalinskaya apuntó contra la WTA antes de jugar contra Swiatek: “Parece un poco parcial”

ver también
Mientras el Chino Ríos ganó 9,7 millones de dólares en premios, esto consiguió Guga Kuerten







