Un nuevo capítulo repudiable ha tenido lugar este martes en el futbol europeo, esta vez, con Luis Díaz en el centro de la escena. El colombiano fue víctima de una inoportuna situación, al sufrir actos racistas en contra de su persona, a raíz de su expulsión de esta tarde en UEFA Champions League. Y no sólo de uno, sino de miles de aficionados que lo hostigaron duramente.
En lo que parecía iba a ser un buen día para el guajiro tras su doblete en el primer tiempo ante PSG, todo se derrumbó: antes del entretiempo, el delantero se fue a las duchas por una fuerte entrada contra Achraf Hakimi. El delantero tricolor llegó a destiempo a la marca, impactó contra el tobillo del defensor parisino y vio la tarjeta roja de parte del árbitro por ‘juego brusco’.
Sin embargo, esta situación no sólo le costó a Luis Díaz no poder jugar el complemento ni tampoco el próximo partido de Champions, sino también un infortunio personal. Los fanáticos marroquíes lo hostigaron de inmediato en sus redes sociales, escribiendo en su última publicación de su cuenta de Instagram cualquier tipo de agravios hirientes contra el colombiano.
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Achraf Hakimi es uno de los líderes y una de las máximas estrellas de la Selección de Marruecos, y por ello, sus simpatizantes se sintieron en la necesidad de ir y atacar al futbolista de Bayern Múnich. Así, plagaron sus redes con comentarios con emojis de ‘mono’ o de ‘f* you’ negros, discriminando a Luis Díaz y cometiendo condenables acciones de racismo que fueron rápidamente criticadas por los aficionados de otras partes del mundo.
El último posteo que había compartido Luis Díaz, de hace seis días atrás, pasó en instantes de 20 mil respuestas a más de 30 mil, prácticamente todas en tono agresivo y con mensajes de este estilo, buscando lastimar los sentimientos del atacante bávaro. En contraposición, algunos usuarios colombianos salieron en defensa de su compatriota, con posteos de cariño y apoyo tras el hostigamiento africano.
Pese a que Luis Díaz en ningún momento tuvo la intención de lesionar a su rival, que con un gesto aceptó sus disculpas mientras se retiraba con los médicos, nuevamente la violencia fue la solución de muchos para descargar toda su ira. En el medio, otra vez, un ser humano que sufre y que carga el peso del prejuicio ajeno sin haber hecho nada para merecerlo. No sólo Bayern Múnich y Colombia sino la gran mayoría de los futboleros están con el guajiro.
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