La Selección Argentina no pudo llegar a su primera final en la historia de los Mundiales Sub 17. Tras igualar 3-3 en un partido de locos, teniendo como gran figura a Agustín Ruberto que anotó por triplicado, cayó ante la Selección de Alemania en la definición por penales y deberá jugar por la medalla de bronce.

El equipo que conduce Diego Placente venía de tener la actuación más convincente de toda la serie de cuartos de final, imponiéndose 3-0 a Brasil, y también jugó un gran partido ante el elenco europeo, llegando a tomar ventaja de 2-1 al cierre de la primera mitad. El complemento se hizo cuesta arriba desde lo físico y Alemania logró darlo vuelta, pero Ruberto anotó en tiempo de adición su tercer gol en el encuentro para mandar la definición a los penales.

El mal inicio de Argentina en las ejecuciones desde los doce pasos, con yerros de Mastantuono y Echeverri, terminó costándole demasiado caro y el penal que logró contener Villalba, quien había reemplazado a Florentin para esa definición, no fue suficiente para revertir la historia.

Ahora, el equipo que conduce Diego Placente deberá jugar por el tercer puesto ante el perdedor de la otra semifinal, que disputan Francia y Mali.