Un año se ha cumplido desde que Dwayne Haskins, ex mariscal de campo de Pittsburgh Steelers, falleciera producto de un accidente automovilístico, provocando luto en la National Football League (NFL).
En ese momento, quien fuera el representante del jugador, Cedric Saunders, indicó que su deceso se produjo tras ser atropellado por un automóvil, mientras se dirigía a un entrenamiento con otros jugadores en el Sur de Florida.
Sin embargo, la familia de Haskins no cree en tal situación y ha entablado una demanda en el condado de Broward, Florida, acusando que hubo una "conspiración de chantaje y robo" que provocó la muerte del ex astro de Steelers.
Grave acusación de la familia de Haskins
A juicio del círculo íntimo del otrora quarterback, "habría sido drogado" la noche de su muerte, y en el libelo, se enumera a cuatro personas, dos restaurantes, un campo de prácticas de golf y un hotel como responsables del hecho.
"Se cree que Dwayne fue atacado y drogado como parte de una conspiración de chantaje y robo; de hecho, su reloj muy caro le fue robado poco antes de su muerte", afirmó Rich Ellsley, abogado de la familia de Haskins, agregando que "este es un paso importante en el proceso de descubrir la verdad completa sobre esta tragedia".
