El fútbol siempre ha sido conocido por los astronómicos salarios que los clubes están dispuestos a pagar a sus jugadores estrella. Sin embargo, lo de Karim Benzema es una auténtica locura, pues el delantero pactó recientemente un contrato millonario con un equipo de Arabia Saudita, específicamente el Al-Ittihad Jeddah Club, el cual ha roto fronteras al punto de casi igualar una suma impresionante de la National Football League (NFL).
Dicho monto ha colocado al ex Real Madrid entre los futbolistas mejor pagados del mundo tras pactar por 215 millones de dólares al año. Ahora, en la NFL existe un límite salarial conocido como el “salary cap”, el cual establece el máximo que los equipos pueden gastar en salarios de jugadores durante un año determinado.
Justamente, el salary cap actual figura en 225 millones de dólares, es decir, el salario anual de Benzema casi iguala el máximo que los clubes de los emparrillados puedes pagar por todos, sí, todos sus jugadores en una sola temporada, quedando apenas 10 millones por debajo del tope salarial de toda una franquicia de la NFL.
Dinero por doquier
Tradicionalmente, los clubes de fútbol han sido los que ofrecen los salarios más altos en el mundo deportivo, pero esta situación puso de manifiesto la creciente influencia económica y el deseo de los clubes de países del Golfo Pérsico de atraer a jugadores de élite mediante ofertas financieras irresistibles.
El salario de Karim Benzema también ha avivado el debate sobre la sostenibilidad económica en el fútbol. Aunque los equipos y ligas quieren a los mejores, los altos salarios pueden generar desequilibrios financieros y aumentar la brecha entre los clubes ricos y los menos privilegiados. Aunque cuando se trata de Arabia Saudita, resulta improbable pensar que existen clubes “pobres” allí.
Finalmente, el francés se lleva las miradas del fútbol y la economía tras su nuevo pacto con Al-Ittihad Jeddah Club, quien tendrá ingresos prácticamente similares a lo que puede gastar una institución entera ded la NFL en sus jugadores.