Por lo general, los lanzadores de la Major League Baseball (MLB) trabajan día a día en cumplir sus objetivos, bien sean individuales o grupales. Por ejemplo, el primer paso es llegar y debutar en el mejor beisbol del mundo.

Una vez cumplido, el próximo reto es obtener un triunfo (en el caso de los abridores). Luego, ganarse la confianza del manager para seguir en la rotación será clave. Después queda saber si el equipo es realmente competitivo para pelear por los MLB Playoffs, y eventualmente la Serie Mundial.

Por otro lado, a nivel individual es interesante pensar que pueden ser protagonistas de un no hit no run o juego perfecto, aunque probablemente, ninguno se suba a la lomita pensando en que va a concretar esa hazaña.

A un out de la gloria

JustamenteDylan Cease ha trabajado así, pero llegó el momento en que un lanzador se da cuenta que está lanzando un juego sin hit ni carreras. Por ende, la presión aumenta conforme transcurren los episodios sobre la lomita.

Lamentablemente, quedó a un out de la gloria, pues en el noveno capítulo recibió el primer y único hit para acabar con su hazaña. Por su puesto, fue retirado y ovacionado por todos los aficionados de Chicago White Sox.